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Chemiewerk Bad Köstritz garantiza la ventaja empresarial mediante un desarrollo profesional dirigido

Una empresa que es una de las más antiguos de su sector debe ser capaz de demostrar flexibilidad en todo momento. En el ejemplo de Chemiewerk Bad Köstritz, se garantiza mediante la interacción de investigación y desarrollo con la flexibilidad en el diseño y la automatización de las plantas, así como mediante el uso consistente de oportunidades de desarrollo profesional.

En Alemania, el 90 por ciento de las empresas de la industria química son PYMES. Lo que estas aproximadamente 2000 empresas tienen en común es el hecho que no fabrican sus productos a escala global como las principales corporaciones. Sin embargo, también se enfrentan a una competencia igual de intensa cuando se trata de productos especializados. Su respuesta a esto es desarrollar nuevos productos y formulaciones casi a diario, así como atender los requisitos de los clientes especializados.
 

“Con el fin de sacar el máximo partido de los equipos integrados, formamos a nuestros empleados que tratan con ellos de una manera muy específica”

En el caso de Chemiewerk Bad Köstritz, que es uno de los fabricantes de productos químicos más antiguos de Alemania, las principales especialidades se encuentran en los tres grupos de productos: ácido silícico, compuestos de azufre y tamices moleculares. Un equipo compuesto por químicos y técnicos de laboratorio lleva a cabo investigaciones en cada una de estas tres áreas de productos para crear nuevas formulaciones y características de producto. Los resultados son, por ejemplo, la fabricación de matices moleculares de zeolita como granulado hidrofílico o moldes compactos sin agentes de adhesión, y parámetros como el tamaño de los poros y las características de la superficie pueden establecerse individualmente para el usuario. En el área del ácido silícico, los productos de soles de sílice y geles de sílice, los requisitos específicos del cliente también son fundamentales. Aquí, los químicos del laboratorio y más tarde los operadores de la planta de producción establecen parámetros de producto como volúmenes de poros, distribuciones de tamaño de partículas y valores de pH con precisión para cada caso de aplicación específico.

Los clientes proceden de casi todos los sectores

La estructura de clientes es tan variada como las formulaciones. Ya sea para la estabilización de proteínas de la cerveza, el equipo antibloqueo en la producción de películas o agentes antiaglutinantes para polvos y sustancias sólidas en el ejemplo de ácido silícico, la lista de los sectores de clientes es larga y, con respecto a los compuestos de azufre, abarca los sectores de la alimentación, la madera, el petróleo y el gas.

Este amplio espectro significa que los requisitos de flexibilidad son extremadamente elevados también en el sector de la producción. “Estamos desarrollando y expandiendo constantemente nuevas líneas de producción para satisfacer los requisitos de nuestros clientes para las características físicas y químicas de nuestros productos”, explica Marko Bräutigam en lo que respecta a los desafíos. Marko es jefe de tecnología de medición y control en Chemiewerk Bad Köstritz y es responsable de la automatización de las líneas en consonancia con el aumento de los requisitos. Y este trabajo es de todo menos aburrido: “Constantemente buscamos formas de mejorar nuestros procesos; por una parte, tomamos nuevos productos del laboratorio y los modificamos para cumplir con el índice de referencia de producción. Esto requiere el reprocesamiento de los sistemas existentes o incluso el desarrollo de nuevos procesos. Por otra parte, todos los miembros del equipo están totalmente comprometidos a mejorar constantemente los procesos existentes”.

Sistemas automatizados a pesar de cambiar características del producto

Actualmente hay nueve líneas de producción diferentes en la planta, en las que se fabrica una gran cantidad de productos diferentes. “Cuando adaptamos los sistemas, por ejemplo, con el fin de generar la densidad de vertido, los tamaños de grano o las nuevas características de superficie necesarias, también tenemos que ocuparnos de la selección y adquisición de la tecnología de sistemas y la planificación completa de la tecnología de ingeniería eléctrica desde el sensor hasta el motor. Los sistemas automatizados también deben adaptarse al producto correspondiente. Sin embargo, también es importante que intentemos optimizar el lugar de trabajo del operador de planta individual con cada cambio que realicemos”, dice Bräutigam.

“Estos cursos de formación también son una oportunidad de bienvenida para que nuestros empleados se beneficien de un intercambio de ideas fuera de la empresa”

En un momento de creciente presión para innovar e implementar las innovaciones rápidamente, estos desafíos no se pueden cumplir solo con cambios internos. Tanto cuando se trata de la construcción como de la operación, se eligen proveedores de servicios específicos de nuevo para aprovechar conocimientos especializados vitales. “Veamos el problema de los motores de accionamiento: una de las piezas más importantes de los equipos de producción. Para nosotros, trabajar con motores con control de frecuencia que ahorran energía ha sido la norma durante años. Sin embargo, la puesta en marcha y el mantenimiento de estos cada vez son más complejos. Con el fin de sacar el máximo partido de los equipos integrados, formamos a nuestros empleados para que lo aborden de una manera muy específica”, comenta Bräutigam,

y eligió a itsme Schultz+Erbse como socio para esta formación. Bajo el paraguas de itsme Industrial Automation, este proveedor para las necesidades electrotécnicas y mecánicas del sector ofrece más de 65 cursos de formación y talleres especializados, así como un servicio técnico y servicios de consultoría. La oferta de formación en Alemania incluye cursos de formación internos específicos para clientes, así como formación sobre aplicaciones y productos de fabricantes concretos. En el área de la tecnología de accionamiento, actualmente se están centrando en particular en motores ABB y convertidores de frecuencia. Por lo tanto, los expertos de itsme no solo están en contacto con el cliente como parte de los proyectos y servicios de consultoría o asistencia técnica, sino también en el aula. Aquí, cursos como “Tecnología de accionamiento de convertidor de frecuencia básica (ABB)”, “Tecnología de accionamiento de convertidor de frecuencia avanzada (ABB)” y el taller “ABB ACSX80/X50”, interesan a usuarios como Marko Bräutigam, en particular.

Promover el conocimiento en profundidad de la tecnología que se emplea

Según los grupos de productos y de fabricantes, así como de los requisitos específicos de los clientes, cuando proceda, los expertos técnicos correspondientes de itsme Industrial Automation diseñan talleres y cursos de formación sobre diferentes temas relacionados con la automatización industrial. Los cursos sobre la tecnología de accionamiento ABB están diseñados e implementados principalmente por los asesores técnicos Martin Franz y Felix Hollstein, en colaboración con el fabricante ABB. El objetivo es en primer lugar proporcionar incluso a esos participantes unas pinceladas previas sobre el área de la ingeniería eléctrica y conocimientos básicos de las máquinas eléctricas y de los convertidores de frecuencia. El diseño y la función de un convertidor de frecuencia, así como su parametrización, se tratan minuciosamente en el curso, y se comentan temas como los problemas de EMC. “Nuestro objetivo es que los participantes entiendan las correlaciones e identifiquen mejor el impacto que tienen ciertos cambios”, explica Hollstein con respecto al concepto.

El equipo comienza con la construcción y el modo de funcionamiento, el comportamiento en funcionamiento, así como los distintos tipos de construcción de motores asíncronos y convertidores de frecuencia. En la parte práctica del curso, los participantes trabajan en la parametrización de los convertidores y su configuración utilizando el software ABB. “Las nuevas funciones como la monitorización en el caso de convertidores de frecuencia ABB, por ejemplo, para fines de resolución de problemas son bien recibidos por los participantes y se trabajan a fondo en la parte práctica. Y con nosotros, los participantes pueden llevar el equipo de demostración al extremo, que generalmente no es posible cuando se trata con sistemas de producción”, dice Hollstein.

Sacar el máximo partido de los equipos modernos

“Las exigencias son cada vez más complejas, con respecto a las opciones de ajuste también para el conjunto de estas. Los tipos de equipos cambian y, con ellos, las opciones de configuración varían. Al mismo tiempo, queremos sacar el máximo partido del equipamiento moderno. Por tanto, hemos decidido utilizar solo motores ABB y convertidores de frecuencia para mantener la complejidad al mínimo posible y, al mismo tiempo, hemos encontrado con itsme Schultz+Erbse un socio de sistemas que puede aprovechar los últimos avances con nosotros”, comenta Bräutigam sobre la decisión de trabajar en colaboración con itsme Schultz+Erbse. Este deseo de estar a la vanguardia, combinado con la necesidad de formar a nuevos empleados de Chemiewerk Bad Köstritz, garantiza que los empleados de Bräutigam atiendan regularmente a las sesiones de formación y al centro de desarrollo profesional. “Fundamentalmente, estos cursos de formación también son una oportunidad de bienvenida para que nuestros empleados se beneficien de un intercambio de ideas fuera de la empresa y de que vuelvan con nuevas ideas, un valor añadido para todos los electricistas industriales”, añade.
 

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